La niña, agachada en cuclillas, mojaba sus manos en el agua límpida del pequeño riachuelo que se derramaba desde los caños de la fuente del pueblo. Sonreía al movimiento del líquido elemento tras ser agitado por sus extremidades superiores. Acabó la tarde sentada sobre la tierra seca y viendo nacer los afluentes de aquel riachuelo en miniatura.
Se convirtió en una inteligente profesora de filosofía que no seguía la lista de los libros recomendados en la asignatura que tantos años llevaba enseñando en el Instituto de Secundaria de aquella ciudad.
Tras las vacaciones estivales regresaba a las clases con el fin de contagiar a sus alumnos de su amor a la filosofía. Sus primeras clases del curso comenzaban siempre igual:
-Sé de un lugar en el que una pequeña niña descubrió la riqueza del agua
Cada años más alumnos la elegían como profesora de filosofía porque "siempre nos hace ver la grandeza de las pequeñas cosas. Aquellas con las que se puede alcanzar la felicidad y que no nos ocasionan ningún agravio económico".
"Sé de un lugar ..."
Precioso post. Esa maestra, con su metáfora del agua será un referente seguramente, para más de un alumno
ResponderEliminarUn abrazo
Que linda entrada , no hay mejor cosa que te ocurra en los años del colegio que tener a esa profesora que te hace sentir y emocionarte en la asignatura que te imparta ..desde luego esos caños de agua eran el reflejo de la vida .
ResponderEliminarUn abrazo y feliz viernes.
Ese ligar está en mi corazón y lo comparto con el tuyo.
ResponderEliminarLas mejores maestras hacen de lo más pequeño enormes castillos. Gracias por participar, besos.
ResponderEliminarHola Rhodea Blason , lo primero quiero darte parte de mi energía positiva para que todo te salga muy bien en la operación , y que muy pronto estés de vuelta definitivamente , y lo segundo decirte que tu relato me a gustado mucho , ya que la maestra era una buena maestra , no hay nada más reconfortante , que enseñar bien y tener alumnos que valoren bien tu trabajo , te deseo una feliz noche , besos de flor.
ResponderEliminarPD , Te deseo que pases un feliz fin de semana amiga mía , cuídate mucho.
Precioso lo que has escrito, con una bonita enseñanza y además muy verdadera.
ResponderEliminarMuchos besos.
Bonita entrada que lleva una enseñanza.
ResponderEliminarUn beso
Una ternura, me encantó la metáfora.
ResponderEliminarQue te recuperes pronto, son mis deseos.
Abrazo
Tan breve, tan sencillo y, a la vez, tan complejo, pero en unas gotas de agua, en un chorro, descubrió un universo, su filosofía de vida y su amor a los demás...
ResponderEliminarUn beso muy grande.
¡Precioso!
ResponderEliminarEspero que ya estés totalmente restablecida y en casa.
Un abrazo
En la naturaleza esta el secreto de las cosas importantes de la vida. Buen texto. Un abrazo
ResponderEliminarSin duda quien sabe encontrar la vertiente , encontrara muchas verdades en ela vida porque posee un don de observacion y tendra la riqueza perenne de la sabiduria Un abrazo
ResponderEliminarUna enseñanza de lo más sencilla y natural.
ResponderEliminarEspero te encuentres mejor.
Un beso enorme.
La grandeza de las pequeñas cosas, esas que a fuerza de verlas y sentirlas, pasan desapercibidas y apenas valoradas, como descubrir la inmensa riqueza del agua.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Espero que te encuentres bien ya. Un beso.
ResponderEliminarOjala la profesora pueda transmitir esa habilidad de posar la mirada en las pequeñas cosas
ResponderEliminarHermoso relato!
Abrazo