ESPERANZA, por Rhodéa Blasón ©

 1- 2021

    Yo no espero nada de 2021. Un año que ha nacido con numerosas espectativas puestas en el. La verdad, para mí, el cambio de año siempre ha sido solo eso: el cambio de un número en el calendario.

    Pero después de la crueldad del 2020 no soy capaz de pensar en nada más que en tener y desear salud. Algo, que, por otro lado, no he aprendido en el 20 sino a lo largo de mi vida a base de golpes de salud. Pero siempre he conseguido remontar con esperanza y positividad.

2-Esperanza y positividad

    Algunos creeréis que estas dos palabras no son importantes en nuestras vidas. Pero lo son y mucho.

   Todos tenemos esperanza, incluso sin darnos cuenta, o buscamos mejorar en la vida o en aspectos que esta nos presenta. En cuanto a la positividad ya dudo más que todos la tengamos: es más fácil ver el vaso medio vacío que medio lleno, sobretodo cuando no hay por qué quejarse. Quien nás y más serios problemas tiene utiliza la positividad para sobrevivir.

3-Sobrevivir

 No todos sabemos sobrevivir. Es muy difícil conseguir hacerlo en tiempos tan penosos social y económicamente pero hay que intentarlo por todos los medios posibles. Seguir vivos después del incalculable número de muertes que ha habido durante el año que acabó o de las duras situaciones que se han visto abocadas a atravesar las familias es muy desalentador.

Confiemos en que la salud nos acompañe a todos, que podamos sobrevivir a pesar de los embistes que nos tenga preparada la vida durante los próximos doce meses, que las familias puedan recuperarse ante la ardua posición a la que están sometidas, ...Sobrevivamos con muha esperanza.